Una pregunta muy frecuente es, ¿cómo puedo saber si un vino es de guarda? Así que, hemos decidido hacer este post para ayudarte y que puedas diferenciar e identificar los vinos de guarda. ¡A partir de ahora esa duda se disipará! Vamos a ello.
Un vino puede clasificarse por numerosas características como su añada o denominación de origen. Además, también se puede identificar si se trata de un vino de guarda.
Un vino de guarda, de forma general, reúne todos los requisitos para poder madurar lentamente en una botella. Entre otros parámetros, esta situación se relaciona con la concentración de polifenoles, el pH, la acidez total, el alcohol, etc.
Cualquier zona vitícola es capaz de elaborar vinos de guarda. Sin embargo, no todos los vinos pueden realizar la guarda y mantener el equilibro que resulta tan esencial para su categoría.
¿Cuánto tiempo dura cada tipo de vino?
Normalmente un vino se consume al año siguiente de su vendimia. No obstante, hay vinos que, con el paso del tiempo, adquieren nuevos aromas y potencian su calidad. Según las normativas de los Consejos Reguladores, podríamos afirmar que un vino crianza se puede guardar durante 4 años, desde su salida al mercado, un vino reserva unos 8 años y un vino Gran Reserva durará hasta 15 años.
Para un vino de guarda es clave lograr una estructura equilibrada. Hay muchos factores que influyen en su capacidad de envejecer como, por ejemplo, las variedades que lo componen, el nivel de acidez, la carga tánica o su graduación alcohólica.
¿Qué uvas facilitarán un vino de guarda?
La uva tempranillo presenta una buena capacidad de envejecimiento. Lo que da al consumidor un vino intenso y con un alto contenido en fruta durante sus primeros años. Conforme pasa el tiempo, se vuelve más complejo y reposado.
Respecto a los blancos, pueden evolucionar menos en botella a lo largo de los años. Aunque, la variedad chardonnay ha demostrado una muy buena evolución. También, la uva verdejo puede mostrar una complejidad años después de su embotellado.
Por otro lado, la uva viura, es otra de las variedades que gana con la guarda. Los blancos envejecidos en barrica, se expresan mejor con los años.
¿Qué ocurre si se guarda un vino demasiado tiempo?
Con el tiempo, el vino envejece, se oxida y va perdiendo sus aromas frutales. Sin embargo, desarrolla otros más complejos que aumentan su calidad. Pero, cuando se intenta guardar un vino que no posee las cualidades necesarias, termina perdiendo la acidez. Y, hay que tener en cuenta, que la acidez es la máxima responsable de mantener su estructura. Así que, se transforma, en un vino muerto.
¿Cómo adivinar si un vino es de guarda?
Para saberlo hay que beberlo y prestar atención a las siguientes características.
– Acidez. Los vinos con acidez alta van a tener capacidad de guarda. Esta característica es el principal indicador de que un vino necesita tiempo para mejorar. Es decir, si un vino tiene una gran acidez, será porque es muy joven y quizás, con unos años de guarda en botella mejorará.
– Alcohol. Si un vino tiene una alta carga alcohólica es probable que se puedan guardar. El motivo es que, con el tiempo puede perder alcohol mientras espera en botella. Así, podría percibirse más equilibrado tanto en boca como en nariz.
– Barrica. Si un vino después de la fermentación en acero para a una barrica a terminar de pulirse, podrá tener una mayor capacidad de guarda. La madera le proporciona un efecto protector y antioxidante.
– Edad de la vid. Si una parra es vieja, engendrará uvas de mejor casta, muy concentradas. Esto facilitará la elaboración de vinos con mayor expectativa de vida.
– La etiqueta del vino. Las contra etiquetas del vino nos ayudarán a guiarnos y así saber cómo beber un vino.
Una vez explicado esto, hay que decir que estos puntos no son definitivos. La capacidad de guarda de un vino dependerá de varios factores que se aclararán abriéndolo y degustándolo. Así que, bebe tu vino y tendrás mucho más claro cuánto tiempo podrás guardarlo. Pero, ¡ten cuidado al abrir tu botella de vino! Te dejamos un post para que evites los errores más frecuentes al abrir una botella de vino.